Uno de los “problemas”
del mundo vegano es la substitución del huevo en muchos platos. El huevo se
utiliza para muchas recetas sobretodo en el mundo de los postres. Es una de las
razones por las que cuando le dices a alguien “no como nada que provenga del
animal” te pregunta: ¿y qué comes? Y aun así hasta que no prueban repostería
hecha sin huevo no se lo creen.
El problema de la falta del
huevo es que necesitamos un ingrediente que nos ayude a vincular los alimentos,
a que estos queden unidos. Para entenderlo mejor vamos a decir que el huevo
hace el papel de pegamento en la cocina.
El ingrediente que más
utilizo para este propósito es la maicena (harina, fécula o almidón de maíz).
Si en una receta normal
se necesita un huevo yo le hecho dos cucharadas soperas de maicena.
También hay otros
ingredientes que pueden servir para hacer esta substitución:
- 2 cucharadas de fécula de patata = 1 huevo
- 1 cucharada de harina de soja + 2 cucharadas de agua = 1 huevo
- 1 cucharada de leche de soja en polvo + 1 cucharada de maicena + 2 cucharadas de agua = 1 huevo
En la mayoría de recetas utilizare la maicena pero
vosotros podéis utilizar lo que os vaya mejor de estas combinaciones.
También resuelve el
problema para todas aquellas personas que sean alérgicas al huevo.
Aunque dependiendo de la
receta es mejor una combinación o la otra, a vosotros de probar cual es la
mejor!